martes, 5 de junio de 2012

Nube de polvo

Derrumbarse, venirse abajo y perder el control de tu alma. Perder todo el control sobre tus sentimientos y tus acciones. No entender qué es lo que sientes, ni poder saber con total seguridad qué es lo que de verdad quieres o lo que en realidad no quieres.

Todo se vuelve una nube de humo donde se mezclan sentimientos, deseos, miedos, ambiciones, recuerdos y, lo peor de todo, la dura realidad. 

Empiezas a perder la visión nítida que tenías antes de las cosas. Las ideas claras que siempre habías tenido, esas que habían estado siempre fijas en tu cabeza: las pierdes también.

Y no sabes que hacer. Pasan las horas y los días y sigues igual. Lo dejas pasar. Te subes al barco y dejas que te lleve la marea porque no sabes como pararlo - tampoco sabes sí lo quieres parar. 

Pero llega un momento en el que dices basta. Y, durante unos breves minutos, vuelves a verlo todo como antes y piensas y te alegras de que todo haya vuelta a 'la normalidad'. Entonces es cuando te das cuenta de que has cambiado. Sí, de que ya no eres la misma. La situación y todo lo que traía arrastrando desde hace ya tiempo te ha transformado en alguien distinto. Alguien que, a partir de ahora, llevará una coraza para evitar volver a caer en la misma trampa. Para protegerse, tal vez, de los recuerdos que la invaden y que juegan con sus sentimientos.

3 comentarios:

  1. Dí que sí! Tú siempre hacia delante, que, aunque a veces no te des cuenta, estás rodeada de gente que te quiere muchísimo.

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  2. Ánimo niña.

    Entiendo perfectamente esa mezcla de sensaciones, ese momento en el que no sabes qué hacer. Pero te aseguro que todo eso pasa, ten un poquito de paciencia... verás que pronto vas a ser capaz de aclararte.

    Saludos (:

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Muchísimas gracias por comentar, no sabes cuánto lo aprecio <3